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CÓMO SOBREVIVIR EL BLOQUEO DEL ESCRITOR – Y NO MORIR EN EL INTENTO 1/2 partes

Primer sábado de marzo y tenemos un breve descanso para Laura. Así que vamos a entrar en este tema que podría servirles en algo.

Seamos sinceros, muchos escribimos poco, nos dedicamos a escribir en algún momento de inspiración o cuando el reto del mes nos lo pide. ¿Pero, se nos ha ocurrido escribir una colección y depurar nuestros trabajos engavetados? ¿Nos atrevemos con un cuento o novela corta?

Muchos no lo hacemos porque no tenemos una técnica para hacerlo y en muchas ocasiones cuando nos planteamos la idea de: ¡Hoy sí empiezo!... nos topamos que miramos la pantalla o la página un largo rato sin escribir nada.


En esta entrada nos concentraremos en el bloqueo y una segunda parte en cómo ser más productivo.


¿Qué es el bloqueo del escritor?

En resumen a las diversas opiniones, podemos definirlo como la condición que le ocurre a los autores creativos y, en especial, a los escritores, que les impide crear nuevo material o su trabajo sufre retrasos. Puede tener distintas causas, aunque normalmente es la falta de inspiración o las distracciones continuas.


Tal como mencioné, esos bloqueos pueden ser por procrastinación o problemas aún más graves, como ser: problemas emocionales, económicos, depresión, enfermedad, etc. Pero quizá la más común, (la que los escritores mencionan con más frecuencia) es la sentirse presionados a escribir.  

Esto puede hacerte sentir ahogado y/o te comienzas a exigir tanto, que el resultado es a la inversa, ocasionando una incapacidad de continuar. Nos abrumamos cuando nuestro proyecto de escritura está condicionado por una exigencia personal, como escribir un determinado género o estilo, o nos ponemos una fecha tope.

Asimismo, un bloqueo puede darse en escritores poco experimentados que todavía se sienten inseguros de su formación literaria. Cuestionan sus habilidades o creen que no son capaces de plasmar sus ideas sin una guía metódica.


Todos en una medida menor o mayor, lo hemos experimentado en cualquiera de sus etapas. Lo importante es aprender a ser más productivo y cómo lograr vencer los bloqueos de nula creatividad.


Muchos sufrimos de fobias, y existe la llamada "terapia de choque". ¿Miedo a las arañas? Toma una entre las manos. ¿Miedo a las alturas? Toma un paracaídas y lanzarte desde una avioneta… ¿Miedo a la página en blanco? ¡¡¡Tómala y comienza a llenarla!!!


Todos los temores son desarrollados en algún momento de nuestra vida, cuando sufrimos una circunstancia como denotador. Yo cuando era niña, como todos a esa edad, no le tenía miedo a nada. Podía tocar una lagartija o recolectar gusanos de una planta... hasta que un día tomé uno "peludo" que me quemó los dedos y desde entonces no solo les tengo miedo, sino que desarrollé asco por ellos.

Muchas veces no contamos a otros que nos gusta escribir o deseamos ser escritores. Sentimos duda sobre nuestras habilidades, la crítica, etc. En mi caso, es al contrario, todos saben que escribo... pero nadie me pregunta sobre mis trabajos, o piden leer algo mío. Y eso puede ser en alguna medida también un desmotivador... las únicas dos personas en el mundo que me apoyaban ya no las tengo, una de ellas mi madre. Sin embargo, me considero una persona necia a la hora de escribir y mi motivación son las palabras en si mismas.


Pero no somos islas. Es por ello que grupos como este, donde nos reunimos aquellos que amamos la escritura podemos sacar todo lo que llevamos adentro. Podemos crear grupos de discusión (por ello creamos el FORO) y participar en los retos y talleres literarios. La interacción con otros, dar a conocer nuestras experiencias, los trabajos, el simple hecho de hablar acerca de las dudas, y hasta el consejo mutuo sobre técnicas narrativas, nos servirán como un deshago y motivador.

No olvides que esta es una comunidad, no solo un blog de lectura, por ello siempre vamos a motivarte a participar.


Consejos prácticos e importantes para vencer la página en blanco
  • 1- Llena la página en blanco – Debemos enfrentar a lo que tememos. Comienza a escribir lo que se te ocurra. Si es un proyecto nuevo, digamos deseas escribir una historia de ciencia ficción, comienza por lo cotidiano: Traslada un momento cualquiera de tu día a día y dale una vuelta de tuerca a ese hecho común. Por ejemplo, te quedas atascado en el tráfico, tu hijo no puede faltar a su partido de fútbol. El ruido de las bocinas de los autos detrás de ti. Y simplemente, tocas el botón rojo del tablero y una hélice sale del techo de tu auto para elevarse y dejar el caos muy debajo de ustedes. Claro, eres una versión de Iron(Wo)Man o algo así. Una vez que te sientas cómodo de seguir escribiendo, retoma las ideas que pudiste tener antes y/o dale continuidad a esa historia que ya estaba en proceso.


  • 2- Cambia de estilo – Muchas veces tener dudas sobre nuestras habilidades nos limita. Toma un libro de un escritor que te gusta y trata de seguir su estilo con algo original tuyo. O por el contrario, toma a ese libro y redáctalo como tú crees que podría gustarte más. No te gustó el final de Drácula de Bram Stoker... gira la tuerca y escribe un escape triunfal.


  • 3 – Confía en tus notas – Insistiré hasta la muerte, que un escriyor NO debe de usar WORD o programas similares para escribir. Existen programas como Scrivener, YWriter o Plume Creative que son buenas opciones, ya que son diseñados para ese fin: la escritura creativa. Algunos escriben en Google Drive, porque es una excelente herramienta para poder acceder a tus archivos desde cualquier ordenador. Sin embargo es tan impráctico como cualquier programa de texto. Lo aconsejo solo como "copia de respaldo" de tus trabajos. El blog de notas, o el Note de Google, las fichas en físico, etc. son metodos que desaconsejo por su inoperancia a la hora de buscar un dato concreto entre tanta información. Pero todavía existen aquellos que aún gustan de escribir a mano, a máquina o con un procesador de texto. Si esto les hace sentir seguros y cómodos pueden seguir haciéndolo. Solo recuerda, o lleva un registro del número de página de tus escenas/capitulos, para que no pierdas tiempo si necesitas buscar información o leer una parte para darle continuidad o veracidad. Buscarlo no debe de tomarte sino unos pocos minutos. Recuerda que tus notas son un apoyo, y nunca deben de ser un motivo para que pierdas el tiempo o te distraigas de tu objetivo principal: escribir.


  • 4 – Usa el método binomio fantástico – Un binomio como tal, se conoce como el pensamiento que forma en parejas conceptos, comúnmente opuestos, como: grande/pequeño, día/noche, caliente/frío. Esto permite entender mucho mejor los elementos. Podríamos incluir aquellos binomios lógicos, no necesariamente relacionados por oposición (como los ejemplos mencionados). Sino aquellos de fácil asociación, como por ejemplo, papel/lápiz o luna/estrellas. Pero un Binomio Fantástico es distinto. Son conceptos alejados uno al otro, que para al unificarlos tenemos que poner a trabajar todo nuestro ingenio. La distancia es necesaria para que la aproximación resulte insólita.    Los retos de escritura de este blog hace uso de las palabras obligadas con binomios fantásticos para escribir un relato. Una forma util para buscar binomios fantásticos como disparador creativo es el azar como gran aliado: puedes poner el dedo aleatoriamente sobre las líneas de un diccionario, libro o revista. O pide a dos personas que escriban su ocurrencia en un papel. Esta técnica mejora  la capacidad asociativa.  Si deseas un apoyo en Internet puedes probar: palabrasaleatorias.com, que hemos usado en alguna ocasión para seleccionar nuestros retos. También el blog de Daniel Pinero (escojes entre sustantivo, adjetivo o verbo) pero solo te ofrece una por tipo. O probar Nombrame (que es un generador de palabras inventadas, en el caso que lo necesites, por ejemplo estás escribiendo un relato historico o fantástico). Puedes buscar muchas otras opciones en la web.


  • 5 – Lluvia de ideas – Este término es muy utilizado en marketing, sin embargo quienes escribimos podemos hacer uso de este recurso. Mientras más ideas tengamos respecto a algo, más opciones podemos encontrar para continuar con el desarrollo del texto o utilizarlo como un desbloqueador instántaneo. Toma en cuenta que la lluvia de ideas, no solo es seguir la misma línea, puedes darle vuelta a 180° a tu historia. Te anoto algunas de esas sugerencias:

  • 5a -Modifica el tiempo: Lleva tu proyecto a una época histórica diferente. Si no tienes aún una idea concreta en que tiempo se ubica tu escrito, puedes jugar con diferentes ambientaciones: que tu novela se ubique en la época contemporánea, y durante la Segunda Guerra Mundial, o por el contrario en el siglo XXIII. Con el cambio temporal, tendrás muchas otras opciones que adicionar a tu historia. Romper el ciclo del bloqueo con un cambio tan drástico que te haga salir de tu zona de confort. Esto te servirá para guiarte que "tiempo" puede adaptarse mejor tu escrito o elegir uno con el que te sientas con más comodidad. Si ya has "ambientado" tu escrito y te has bloqueado, puedes hacer flashback o forward a la misma.

  • 5b -Modifica el lugar: Si ubicas tu historia en una determinada civilización, cultura, religión o etnia, las posibilidades de darle giros argumentales se amplían. Por lo general escribimos sobre nuestro propio entorno, pero estamos en una época más globalizada. Vence tus patrones de pensamiento. Puedes cambiar el entorno de una urbe citadina a una amplia villa campestre, el escenario influye en los personajes. Toma en cuenta qué deseas contar. Recuerda que si ya tienes tu historia ambientada, esto solo te servirá para desbloquear tu pausa, creando un ambiente diferente que te libere la creatividad. Por ejemplo: Tu personaje está pasando un mal momento... y no sabes cómo avanzar. Puedes imaginarlo que está en el caldero de unos caníbales y él debe idear cómo escapar. Esto te ayudará a ver esas fortalezas del carácter del personaje que quizá en su ambiente natural no le veías...

  • 5c -Invierte al personaje: Si estás acostumbrado a que tu personaje principal siempre es un hombre, ¿por qué no eliges que sea una mujer? Si tienes una idea sobre un personaje X, piensa qué ocurría si fuera diferente. De otro sexo, con otra profesión o edad. Qué acerca de su personalidad o su intelecto, las posibilidades son infinitas.

  • 5d -Rolestorming: Esta es una técnica usada en Marketing, que consiste en hacer una lluvia de ideas, pero poniéndote en un papel diferente al tuyo. Por ejemplo, un grupo de cabelleros publicistas piensan en las necesidades de una ama de casa, porque su cliente es una fábrica de detergente líquido. Trasladado al ámbito literario, sería ponerte en el papel de un amigo tuyo, una celebridad actual, o un personaje histórico. Ponerte en los zapatos de otros, ampliará tus propias perspectivas. Sin importar que POV elijas para tus relatos, usar este método te ayuda a generar ideas nuevas y creativas. Los resultados podrían sorprenderte.

  • 5e -Escritura automática (Auto-writing): A veces no necesitamos pensar solo en cómo vamos a desarrollar nuestra idea o continuar batallando con la página en blanco. Podemos salir de esa área de conflicto y usar este método alternativo con algo que no tenga nada que ver con aquello que nos bloquea. La escritura automática consiste en escribir al azar. Un método de mediados del siglo XX, sugería hacerlo preferiblemente con otras personas. Pero a veces no contamos con ese apoyo. Así que no podemos tener compañeros o necesitamos hacerlo solos. Se eligen palabras indistintas, un sujeto, un verbo y un predicado. Y a través de esos tres seleccionado comenzamos a escribir sin pensar mucho cualquier cosa que creemos que encaja con ellos. Por ejemplo: un lobo, soplar, desprender desde los cimientos y al final terminaríamos con una idea muy distinta al cuento de los “Tres Cerditos”.


  • 6 – La pata de conejo (elemento amuleto): Todas las personas tenemos manías, y también los escritores y artistas. El cantante Ricardo Montaner usa trajes de sastre y zapatillas deportivas (de la suerte) para sus conciertos. Ernest Hemingway escribía de pie (con un truco en el bolsillo, una pata de conejo y unas castañas). Salvador Dalí dormía con una cuchara en la mano. Se dice que al caer, el ruido le hacía despertar y recordar lo que había soñado (quizá por eso la rareza de sus creaciones). La mente es muy poderosa, si nuestra falta de inspiración es por la falta de concentración, podemos trasladar esa necesidad a un objeto X. En mi caso, no puedo escribir sin tener los audífonos pegados a mis oídos, aún sin escuchar nada. ¿Por qué? Porque cuando comencé a escribir como una desquiciada (más de seis mil palabras en una noche), lo hacía escuchando música. Al sentir en mis oídos los audífonos inconscientemente me hace reconocer que puedo llevar a cabo esa escritura de nuevo. Quizá lo tuyo sea otra cosa, pero recuerda si hay algo específico que haces, tienes cerca o usas en esos mejores momentos de escritura. Oblígate a creer que ese amuleto mágico puedo sacarte de tu procrastinación o bloqueo mental.


  • 7 – Confía en tus sueños – Todos soñamos al dormir, al menos cinco veces cada noche. Cuando entramos en el sueño profundo es cuando tenemos sueños que no recordamos, pero cuando estamos por salir del sueño REM podemos seguir soñando y muchas veces despertamos en medio de esos sueños. Hay escritores que colocan un librito de notas y un lápiz para anotar sus sueños justo al momento de despertarse. Otros, toman siestas, y se inspiran de lo que perciben entre el sueño y la vigilia. J.K. Rowlings ha confesado que su idea (e inspiración) ocurrió durante un sueño lúcido cuando viajaba en un tren. Soñó con un pequeño niño aprendiz de mago que la conducía por un bosque. A ella le funcionó más que bien… Vale la pena intentarlo.


  • 8 – Reinventa lo conocido: Seamos sinceros, no hay nada nuevo que escribir. Los literatos cuentan solo unos pocos tipos de historias. Aunque se pueden mencionar por "tema", sus bases son más bien pocas: el amor, el heroismo, la guerra, la supervivencia, el ciclo de vida, el viaje. A lo largo de nuestra vida, nos hemos encontrado con los mismos temas de siempre, en cuentos, leyendas y novelas o vimos sus adaptaciones en la TV o el cine. Hace bastante tiempo atrás, leí un blog de una chica (con el perdón de ella que no recuerdo el nombre) en donde reescribía el cuento de “Caperucita Roja y el Lobo Feroz”, con una niña muy malcriada que hacía sufrir mucho al lobo que era un buen amigo de la pobre abuela quien vivía sola en el bosque. Las preguntas obligadas del cuento del ¿por qué tienes…? La autora ofreció muchas lindas respuestas, y el lobo feroz no era sino casi un perro de compañía para la pobre anciana. Me encantó. Siempre he pensado que todo puede (y debe) mejorarse. Y con el perdón de Perrault yo me quedo con la versión de esa chica. Así que porque no hacer ese ejercicio. Si no podemos avanzar en nuestro propio texto, relajémonos con el relato de otro y démosle un nuevo giro. Una Cenicienta que es tan vengativa como una nueva versión de El Juego del Calamar contra sus hermanastras y su madrastra y hasta con el príncipe que fue incapaz de reconocerle la cara ¡para fijar su fetichismo en sus pies! Un Quijote de la mancha que en lugar de recorrer las tierras por aventuras, se van en una VW con Sancho hacia el desierto de Mojave donde tendrán un Encuentro Cercano del Tercer Tipo..., etc. Todo puedo cambiarse y volver algo conocido en un disparate momentáneo, puede hacernos tener nuevas ideas y servir como un buen relax necesario.


  • 9 – «¿Y si…?» Juego de hipótesis – En el aclamado libro de “La metamorfosis” de Frank Kafka, se planteaba la idea de un hombre que despierta transformado en un insecto. Debo reconocer que vi la película cuando era muy niña y la idea me pareció monstruosa. Pero una hipótesis fantástica siempre es llamativa. Salir del ordinario mundo común por aquello impensable. Dejar lo lógico por lo ilógico, y que todo lo racional sea un disparate artístico. Muchos buenos libros y películas se basan en esa hipótesis fantástica. Memorias de un hombre invisible, El retrato de Dorian Gray, Piel de Zapa, El día de la Marmota, Medianoche en Paris. Sea del género que se quiera, una idea tan anormal puede ser aceptada por el público. Esta clase de ejercicio te ayuda a entrar en una dimensión desconocida si no estás familiarizado con lo que es cómico, el sentido de humor negro, lo fantástico y hasta la ciencia ficción. No es que debas escribir toda una escena o una novela, basta un par de líneas para ayudarte a abandonar el estrés de la página en blanco. Anota en tu agenda o cuaderno esas ideas, revísalas, añade nuevas, nunca sabrás si algo que anotaste alguna vez, puede servirte en el futuro.


  • 10 – Imágenes a la vista – Siempre hemos escuchado la frase: “Una imagen vale más que mil palabras”. Una imagen es subjetiva, puede interpretarse de mil formas diferentes. Las palabras si son usadas sabiamente pueden ir más allá de una idea, y adentrarse al subconsciente, haciendo pensar al lector acerca de algo. Una imagen puede emocionar, así también las palabras, mal orientadas, penosamente no transmitirán nada. Vivimos en un mundo rodeado de imágenes de nos entran por todos lados. La televisión, los medios escritos y el Internet nos ofrecen muchas imágenes que nos impactan de una u otra manera. ¿Por qué no trasmitir en palabras esas emociones?  Podemos ir al buscador de imágenes y escribir una palabra con la que nos sentimos trabados, por ejemplo: Empatía. Elegir una imagen cualquiera y escribir una frase, un micro relato o deshilar la madeja de todas las emociones que esa imagen nos cuenta, con toda una historia trasfondo.  También podemos profundizar, recortar diferentes fotos (ciudades, lugares, personas, elementos, etc.) recortarlas y hacer un collage de varias sacadas al azar. Y escribir una “sinopsis” de esa historia. O si queremos reforzar nuestra narrativa, escribir una escena sobre las mismas. Recuerda que escribimos usando todos los sentidos, ¿porque no usar la vista con mayor profundidad?


  • 11 – Un tiempo (break) para ti Así como no aceptar la exigencia irracional de ningún ambiente opresor de trabajo, no debemos de volvernos a nosotros mismos ese “jefe déspota”. No naciste solo para escribir, aunque ese sea el denominador común de quienes amamos hacerlo. Yo no puedo vivir sin escribir… Pero la realidad es que sí podemos. No podemos vivir sin aire o sin alimento. No soy fan del ejercicio físico, pero a medida que maduras, comenzamos a tomar consciencia de nuestra salud física y hacemos más ejercicio. Muchos entrenadores sugieren el esfuerzo físico al máximo tolerado y luego un tiempo de descanso, breve, pero necesario para no morir de un infarto. Por ello, te enumero algunos de esos “breaks” que algunos amantes de las letras realizan, pequeños ejercicios y hábitos para vencer el bloqueo, algunos ajenos y otros propios. Añade los tuyos a la lista.

  1. Respira. No te agobies por lo que no has escrito. Concéntrate en lo que está completo. Si no has escrito nada, solo aplica cualquier punto arriba detallado.

  2. Toma unos momentos y lee. Puedes optar por leer un determinado tiempo o leer un capítulo entero. La lectura ajena nos distrae, pero también inspira.

  3. Usa las técnicas fáciles, como la escritura libre (free-writing), escribe al azar en un género distinto al que te provoca tu bloqueo. ¿Crees no poder escribir ni una línea? Intenta un juego de palabras, como un crucigrama por cinco o diez minutos. Oxigenará tu cerebro.

  4. Has algo distinto, pero enfocado en tu proyecto. Como por ejemplo diseñar tu propia portada, un material promocional para tus redes sociales, tu fan page o cargarlo como video tráiler en YouTube. ¿No piensas publicar? ¡No importa, sueña!

  5. Tómate un descanso (con horario o calendario) y comienza a planificar algo que has tenido en la gaveta del deseo.

  6. Si trabajas en una computadora de escritorio y tienes una portátil, cambia de ambiente. Copia tu último capítulo y dale continuidad en una cafetería, un parque o en el patio de tu casa, el balcón con vista. No tienes portátil, pero sí un celular… haz uso de la grabadora, habla en lugar de escribir.

  7. Usa tus cinco sentidos. ¿Te bloqueaste en una escena de pelea en un garaje? Escenifícala, corre, salta, has que tu corazón lata con fuera, pierde el aliento. Siente tu sudor. Enciende tu coche y siente el olor de la gasolina, o ve y toca todos los cachivaches que tienes en algún almacén de “revisar y botar” que nunca limpias. Toca el piso, recuerda el sabor salado de la sangre. Trata de ver con un solo ojo, has todo lo que creas que necesitas para sentir a los personajes. Debes escribir pensando en lo que sientes, lo que respiras, lo que saboreas, lo que oyes, lo que ves. Y sobre todo las emociones y sensaciones que sientes a través de todos ellos.

  8. Los japoneses toman un descanso obligado varias veces al día. (siempre y cuando Sí estás trabajando). Haz lo mismo durante tu tiempo de escritura, sobre todo si toma más de dos horas. Ve a la cocina por un vaso de una bebida fría que te guste, un té o café o una barrita de un vegetal crudo. (Aléjate de las frituras, los snacks y cualquier cosa que engorde. Escribir es sedentario, no añadas más mal a ello).

  9. Bebe mucha pero mucha agua… te obligará a alejarte de la escritura para buscar el baño.

  10. Si tienes a alguien cercano (que no sea un crítico déspota o un admirador empedernido) deja que otro lea lo que has escrito y te de sus comentarios, pregúntale sobre cómo cree que avanzará la historia, si es muy obvio... buscar darle una vuelta extra a ese rollo.

  11. Evalúa cuanto escribes. No cuentes palabras, sino un avance más amplio, como oraciones y párrafos. Digamos en un determinado tiempo. Media hora es un tiempo adecuado. Trata que el siguiente lapso de tiempo sea un poco más extenso. Compite contigo mismo.

  12. Aunque quien escribe debe hacerlo todos los días, crear el hábito a veces es complicado si tienes muchas responsabilidades. Escribe porque amas hacerlo. Nunca escribas por obligación, sin pasión. Escribe, lee, evalúa tu trabajo a diario, aunque no los cumplas los tres a la vez.

Hemos avanzado mucho en cómo vencer la página en blanco, romper los ciclos de procrastinación que también nos impiden avanzar tanto como quisiéramos en nuestros proyectos.

En la próxima semana, tendrás la conclusión de este tema, con un enfoque en ¡Cómo ser más productivos! No solo basta con escribir, sino que el tiempo que invertimos en la escritura sea más ordenado, eficiente y recompense el sacrificio.


Te invito a que en la caja de comentarios, nos comentes cómo ejecutas alguno de los puntos expuestos... o cuál de ellos crees que puedes usar para superar los bloqueos.

No te pierdas la próxima entrada. Mientras tanto… ¡nos leemos!


***

Recuerda que seguimos esperando tus participación, comentarios... queremos premiarte con las insignias especiales para tí...


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