Llegó antes de lo esperado. ¿Por qué? Porque siempre en nuestra familia creÃmos en hadas, ansiábamos conocer una, no fue una sorpresa su aparición para esta familia de locos lindos.
Sus grandes ojos del color del cielo, su tamaño delicado, su piel blanca y sus dos alitas escondidas detrás nos confirmaron que era nuestra esperada hada.
Se quedó acurrucada, con sus sonidos angelicales nos fue llevando a mágicas aventuras: Gracias a ella estamos conociendo seres maravillosos que nos dibuja y pinta con esmero. Como no entendemos su idioma nos modela animales misteriosos con arcilla. ¡Es tan creativa y divertida!
Hace unos meses vivimos una experiencia extraña, nos llevó a una selva inundado de verde, caminamos por senderos como vÃboras y allà descubrimos las múltiples formas de la naturaleza, en las hojas, los aromas de las flores, los hongos multicolores y lo que más le gusta: esos insectos, las vaquitas de San Antonio, que tienen pintitas negras en sus alitas, nos explicó con dibujos en el suelo, que también pueden tener variados colores y formas. Atravesamos arroyos, saltamos piedras gigantes coloreadas, nos bañamos y jugamos todo el dÃa. Un arco iris nos acompañó mucho tiempo. ¡Milagros de hadas!
Casi al anochecer en el medio de esta selva tan hermosa apareció un ladrón, uno inesperado y tenebroso que se llevó a nuestra hada. Lo más sorprendente es que es invisible que está atacando a muchas personas, que las tiene encerradas y no pueden abrazarse ni salir a trabajar ni ir a la escuela. La gente muere sola sin consuelo.
Se la llevó lejos, sabemos que está bien que ahora entretiene a otras personas, pero nosotros la extrañamos y esperamos encontramos para seguir disfrutando su presencia, ella cambió nuestra vida y es difÃcil tenerla tan lejos.
Mientras esperamos el regreso les contaré un secreto, pero no lo divulguen, por favor: el hada se llama Josefina y es nuestra hermosa nieta.
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